Él es el sol ardiente que nos ilumina, la fuente de agua viva que nos purifica, el Corazón Sacratísimo de Jesús, que nos ama con amor inefable, cuya imagen se yergue magnífica en el Centro de España, que en 1919 se consagró a Él y en 1965 volvió a hacerlo. Los Obispos españoles renovaron la Consagración en el XC Aniversario, en 2009. Y esperamos con expectación el Centenario, en 2019.
Dos ingenieros, vasco uno, José María Alonso; mejicano el otro, el hispanista Eduardo Vital. Es la primera vez que visitan el Cerro y se quedan admirados y entusiasmados con el conjunto. Posan ante el monumento vilmente fusilado por el odio de las turbas rojas.
Y ante la placa que recuerda que el Generalísimo Franco rehizo el monumento con más grandiosidad aún, dotándolo de una Basílica donde se celebran numerosas ceremonias.
El día 23 se han celebrado misas cada hora durante toda la mañana. Hemos podido asistir a la de 11, concelebrada por varios sacerdotes, acompañando a sendas peregrinaciones parroquiales, sobre todo de Fuenlabrada.
También estaban las Salesas, distinguidas con la revelación del Sagrado Corazón a una de sus hijas, Santa Margarita María de Alacoque. Una de ellas hizo una de las lecturas. Magnífico el salmo:
"El Señor es misericordioso siempre con aquellos que le temen".
Magnífica fue la homilía de un joven sacerdote, fogoso y convencido, sobre el amor de Dios sobre nosotros, pero agradeciendo también el poder estar en este lugar donde tantas veces se ha consagrado a España al Corazón de Jesús.
El oficiante principal dijo claramente antes de la Consagración que todo el que no estuviera impedido debía ponerse de rodillas. Y antes de comulgar, que había que estar en Gracia de Dios para recibir la Sagrada Comunión.
Fueron cientos los asistentes a esta Misa, unos 500. Durante la Comunión, "Tú has venido a la orilla" y "Cantemos al Amor de los amores". Al final estalló el "Corazón Santo, Tú reinarás".
En la Misa de 12 había menos gente y un solo celebrante, pero todo el frontal estaba lleno.
Los jóvenes sacerdotes departen amigablemente al final de la Misa. El de la homilía es el que está más a la derecha de los que visten de negro y clérigman. Uno, con sotana.
El hispanista Eduardo Vital gozó mucho de la visita. En esta foto, al pie de la estatua, con la Ermita de Nuestra Señora de los Ángeles y el Convento de las Carmelitas al fondo.
En esta otra, con uno de los grupos escultóricos, que representa la Hispanidad, el Descubrimiento, Isabel la Católica, Colón, los indios, los ídolos caídos...
No hay comentarios:
Publicar un comentario