En su homilía ha agradecido la colaboración de todos y ha mencionado la tarea de consolidar las capillas en las diversas provincias, las religiosas de Griñón y la reciente escuela.
Durante la Misa, tiene la gentileza de volverse para leer en español la Epístola del día.
Y lo mismo con el Evangelio, para que pueda ser comprendido mejor por los fieles que no disponen de Misal.
La Comunión, como siempre, de rodillas y en la boca, como siempre en el rito de San Pío V.
Tras la Misa, tuvo lugar una reunión improvisada en el garaje del edificio, para agradecer al Padre Brunet su estancia en España y hacerle un regalo como recuerdo para él.
Manuel Galve hizo un breve repaso a los 30 años habidos desde la muerte del santo fundador, Monseñor Marcel Lefebvre, en los que la Fraternidad ha continuado el rumbo con el carisma que de él recibió. En medio de esta crisis que nos asuela, en España, en la Iglesia, en la humanidad, la Fraternidad es un faro de luz entre las tinieblas. Y a buen seguro Dios suscitará vocaciones para servirle en esta tierra también de María, como la América evangelizada por España a la que va destinado el Padre Brunet.
El regalo fue un sobrepelliz, en espera de otro más que se está confeccionando.
2 comentarios:
Que el Señor siga bendiciendo al Padre Philippe Brunet en su nueva andadura.
Amén!!!
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